Berlín, 19 de Abril de 1945. Último discurso de Joseph Goebbels

Si nuestros enemigos imponen su voluntad,la humanidad naufragara en un mar de sangre y de lagrimas.Habrá guerras y mas guerras que se sucederán prácticamente sin interrupción.Sin duda serán mas reducidas y mas aisladas geopolíticamente que esta guerra porque ya nadie se atreverá tan irresponsablemente a provocar una hecatombe semejante a la actual.Los hombres se mataran por poseer las cosas mas superfluas y banales.Las plutocracias naufragaran en una desesperada carrera por dar cada vez mas lujos a la humanidad corrompida por la molicie.Al final las plutocracias terminaran por no poder dar de comer a una población cada vez mas numerosa.Y vendrá otra vez el bolcheviquismo a ofrecer tentadoramente las mismas soluciones falsas que nos ofrecieron a nosotros.Y aquellos que querrán poner remedio a este estado de cosas no tendrán otra alternativa que volver la vista hacia lo que nosotros hicimos y hacia aquello por lo cual seguiremos peleando hasta el amargo final.Aquellos que quieran mejorar este mundo decadente y corrupto tendrán que comprender plutocracia y bolcheviquismo no son los dos únicos caminos para redimir a la Humanidad de la miseria y el fracaso.Por que hay un tercer camino que es el nuestro.Vendrán hombres que aun sin mencionarnos,porque les estará prohibido o porque temerán hacerlo,intentaran transitar por este camino nuestro.Y serán combatidos y traicionados al igual que nosotros lo fuimos.Pero al final VENCEREMOS porque lo bueno y lo verdadero siempre triunfa en este mundo!

miércoles, 7 de marzo de 2012

Las fuentes del conocimiento masónico. simbolismo y realidad

La serpiente era el más astuto de todos los animales del campo que Dios había hecho. Y dijo a la mujer: «¿Cómo es que Dios os ha dicho: No comáis de ninguno de los árboles del jardín?» Respondió la mujer a la serpiente: «Podemos comer del fruto de los árboles del jardín. Mas del fruto del árbol que está en medio del jardín, ha dicho Dios: No comáis de él, ni lo toquéis, so pena de muerte.» Replicó la serpiente a la mujer: «De ninguna manera moriréis. Es que Dios sabe muy bien que el día en que comiereis de él, se os abrirán los ojos y seréis como dioses, conocedores del bien y del mal.» Y como viese la mujer que el árbol era bueno para comer, apetecible a la vista y excelente para lograr sabiduría, tomó de su fruto y comió, y dio también a su marido, que igualmente comió. Entonces se les abrieron a entrambos los ojos, y se dieron cuenta de que estaban desnudos; y, cosiendo hojas de higuera, se hicieron unos ceñidores. (Génesis).



Este famoso pasaje del génesis, nos revela de una manera claramente simbólica el motivo de la caída de nuestro primeros padres y de todo el género humano como consecuencia de la maldición del pecado, queda claro tanto por la revelación bíblica como por las revelaciones privadas a místicos cristianos (Anna Catalina Emmerick, María Valtorta, etc.) que dicho motivo fue la búsqueda del conocimiento al margen de la voluntad de Dios, dicho de otra manera, los primeros hombres creados puros y libres a imagen y semejanza de Dios, cayeron a causa de elegir tomar para si un conocimiento prohibido ofrecido por la astucia de Satanás antes que obedecer libremente a Dios, este fruto del conocimiento representado como una Manzana por la tradición, no es algo que quedase circunscrito a aquella desgraciada situación.


La masonería, verdadera Sinagoga de Satanás, tiende muy a menudo a explicar las cosas utilizando simbolismos de manera que el conocimiento que desean transmitir quede encriptado para el profano y llegue de manera exclusiva para el iniciado, como verdaderos discípulos de Satanás que son, los masones hoy en día siguen comiendo y ofreciendo esa manzana envenenada, ese fruto del conocimiento que tiene su origen en Satanás y que ofende gravemente la bondad de Dios nuestros Padre creador.

Es bien conocida la manera “simbólica” mediante la cual, Isaac Newton, alumbró la teoría de la Gravedad, cuenta la historia, que sentado debajo de un árbol, una manzana cayó sobre su cabeza, dándole la chispa de la inspiración para formular su famosa teoría.

Pocos saben que Isaac Newton fue un maestro Illuminati que practicó durante toda su vida las más horrendas hechicerías (ocultismo, numerología, alquimia, etc.) El, que sabía hablar perfectamente hebreo, se pasó toda su vida escudriñando las artes oscuras de las cuales sacó la verdadera fuente de su conocimiento, véase el paralelismo con la historia del Génesis.
Newton, sentado bajo el árbol (¿El árbol del conocimiento?) fue repentinamente iluminado al caer sobre su cabeza una manzana (Quiere decir de una manera simbólica, que el conocimiento prohibido descendió sobre el de lo alto iluminando su inteligencia para desarrollar su teoría.)

¿Fue la teoría de la gravedad por tanto producto de una repentina casualidad, o más bien Newton sacó su conocimiento de la misma perversa e ignomiosa fuente de la que bebieron nuestros primeros padres?.


Newton es solo un ejemplo de muchos, otro maestro Illuminati fue Goethe, en su famosa obra “Fausto”, relata cómo dicho personaje vendió su alma al diablo a cambio de recibir el mismo conocimiento prohibido con el que fueron tentados Adán y Eva ¿Acaso Goethe narraba en esta obra su propia historia?.

Ejemplos los tenemos hasta en la literatura infantil, buena prueba de ello puede ser la obra de Blancanieves, la cual, tras aceptar una manzana envenenada ofrecida por una bruja, cae en desgracia en un profundo sueño del cual no puede despertar sino por un acto puro de amor, una vez más se narra de manera simbólica la causa de la caída de nuestros primeros padres, y el motivo de nuestra redención, un acto puro de amor.





Me gustaría acabar este articulo resaltando la figura de la Virgen María, corredentora del género humano, frente a la actitud de Eva que acepta el conocimiento de Satanás comiendo del fruto prohibido y desobedeciendo a Dios, se pone la figura de María, quien se somete absolutamente a la voluntad del Padre creador con la mayor humildad, para ella está reservada la Gran Victoria de nuestra era:

"Pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; esta te aplastarála cabeza, y tú la herirás en el talón" (Génesis).
Así será, María aplastara la cabeza de la serpiente, la causa del pecado del hombre, María desbaratara todos los planes de Satanás y de los que tan fervientemente hacen su voluntad.